✓¿Qué Es El Radar?📡

Radar Antena
El radar es un instrumento muy utilizado en varios países.

El control de tráfico aéreo utiliza radar para rastrear aviones tanto en tierra como en el aire, y también para guiar a los aviones para realizar aterrizajes suaves. La policía usa radar para detectar la velocidad de los automovilistas que circulan en las vías, la NASA utiliza radar para mapear la Tierra y otros planetas, rastrear satélites y desechos espaciales y ayudar con cosas como el atraque y las maniobras. El ejército lo utiliza para detectar al enemigo y guiar las armas.

Los meteorólogos utilizan radares para rastrear tormentas, huracanes y tornados. El radar es una tecnología extremadamente útil.

¿Qué Es El Radar?

La palabra radar viene del inglés y significa RAdio Detection And Ranging (Radio Detección y Telemetría). Esto quiere decir que el radar detecta la presencia de objetos y mide la distancia a que se encuentran por medio de ondas de radio.

El radar fue desarrollado en 1934 por un grupo de técnicos ingleses dirigidos por Watson Watt.
Watson Watt
Pocos años después fue utilizado con gran eficacia en la defensa de Gran Bretaña durante la segunda guerra mundial. Sin embargo, para que fuera posible el éxito del dispositivo de radar, antes se tuvieron que efectuar numerosas investigaciones, la primera de las cuales se debe al físico Heinrich Hertz, que demostró en 1886 que las ondas eléctricas de alta frecuencia producían efectos a distancia. Consideró que este fenómeno se debía a las ondas electromagnéticas que denominó “ondas hertzianas”.

Heinrich Hertz
En la actualidad, además del radar, son muchas las aplicaciones derivadas del conocimiento de las “ondas hertzianas”, por ejemplo la radio, la televisión, la radioastronomía, etc.


¿Cómo funciona el Radar?

Para hacernos una idea de cómo funciona el radar, vamos a compararlo con una linterna eléctrica. Supongamos que estamos en un lugar oscuro y encendemos la linterna. Las ondas luminosas de ésta viajarán en forma de rayo en la dirección en que la enfoquemos. En menos de una millonésima de segundo, el rayo de luz llegará a un objeto cercano y se reflejará.
Radares - GIFMANIA
Al alcanzar nuestros ojos este reflejo, podremos ver el objeto. En cambio, no podremos ver otros objetos que no sean alcanzados por el rayo de luz de la linterna.

Pues bien, el radar funciona de modo muy parecido; en lugar de ondas de luz, utiliza ondas de radio. En realidad, las ondas lumínicas y las de radio no son sino tipos distintos de ondas electromagnéticas. La diferencia principal entre ambas es que tienen tamaños distintos: en el radar, las ondas tienen una longitud de pocos centímetros y reciben el nombre de “microondas”.

Igual que las ondas de radar tienen distinta longitud que las ondas de la luz, también actúan de modo distinto. Por ejemplo, pueden fácilmente atravesar las nubes que cubren el cielo, mientras que la luz no puede hacerlo.

El ojo humano es capaz de captar las ondas lumínicas, mientras que las de radio no pueden ser vistas, oídas o sentidas por el hombre si no es con ayuda de equipos especiales. Con todo, los científicos han descubierto el modo de detectar estas ondas de radio.

Las ondas de radar se concentran en un rayo, igual que las ondas luminosas de tu linterna y son emitidas en una dirección determinada. Cuando alcanzan un objeto, se reflejan en él y son recogidos por una pantalla.

Así, pues, lo primero que nos dice un radar es que sus ondas han captado la presencia de un barco o un avión. Si emitimos el haz de ondas girando lentamente en círculo, podemos explorar el terreno que nos circunda.

Por otro lado, podemos medir con unos aparatos especiales el tiempo que tarda el haz de ondas en ir y volver. Este tiempo es de millonésimas de segundo, pero nos dice con precisión a qué distancia se encuentra el objeto. El tamaño de éste se puede juzgar por la potencia de la onda que refleja: los objetos más grandes reflejan una parte mayor de la onda.

El radar sirve para guiar barcos y aviones, al permitirles “ver” a través de las nubes y de la niebla.

En los puertos marítimos y en los aeropuertos se usa el radar de vigilancia con el fin de guiar el tránsito en los casos de condiciones atmosféricas desfavorables.

El Radar en la meteorología

En el área de la meteorología el radar juega un papel importante; se utiliza para medir y dar seguimiento a fenómenos atmosféricos formados por agua en forma de lluvia, granizo y nieve especialmente.

En efecto, con el radar no sólo se ha podido localizar tormentas, sino que también ha sido posible determinar, desde tierra, la temperatura, presión y humedad existentes a elevadas alturas, así como la velocidad de los vientos en tales alturas.

El radar meteorológico utilizado en los observatorios ubicados en barcos o en tierra es utilizado para sondear frecuentemente el horizonte alrededor de regiones de interés, con objeto de señalar la aparición de focos tormentosos, cumpliendo así un papel importante en los pronósticos meteorológicos. Este tipo de radar actúa de la misma manera que los usados para detectar la posición de aviones o barcos. El radar de los meteorólogos detecta y localiza las masas de gotas de agua que forman las nubes tormentosas. De ahí la importancia que tiene conocer el tamaño de las gotas, pues si éstas fueran demasiado pequeñas, las ondas emitidas por el radar no serían rechazadas por ellas y por consiguiente no se verían en la pantalla del radar.

Las nubes que producen tormentas, generalmente están formadas por gotas de agua grandes y así resulta fácil localizarlas y seguir su desarrollo; las nubes normales de buen tiempo, conocidas como cúmulos que se componen de gotas pequeñas de agua no son detectadas por los radares meteorológicos, debido a esto, aunque ese tipo de nube exista, la pantalla de radar indica cielo claro. Sin embargo, hay radares especiales para esta clase de nubes; pero esos radares no se utilizan para pronosticar el tiempo, sino con fines de investigación.

Con una simple observación de la pantalla del radar, el operador puede conocer rápidamente el estado del tiempo dentro de un radio de 200 kilómetros. Esto es muy importante, porque las tormentas suelen desarrollarse con mucha rapidez, lo cual hace difícil anticipar el pronóstico.

Publicar un comentario

0 Comentarios